Los que nos fuimos de Villarroya a Cataluña

LOS QUE NOS FUIMOS DE VILLARROYA DE LA SIERRA

 En otra página de MIS RECUERDOS DE VILLARROYA…, en el que cuento mis recuerdos de entonces, ya llego a intuir tal como explico con las BODEGAS, ERAS, ACEQUIAS, CAMPOS, etc., los que en estos cuarenta y pico de años que han transcurrido, ha ido desapareciendo, pero no, en el grado que lo ha hecho.

El día del CRISTO, siempre hay bastante gente. Digo bastante, por que la mayoría que están en ZARAGOZA vienen y ya hay bastante ambiente. Pero llega el atardecer del domingo, casi todos marchan, y el pueblo ya se queda vacío.

En las Ferias 1961

En las Ferias 1961

Somos muchos los que nos marchamos de allí, y por no decir nadie, los que han vuelto. Y naturalmente son muy pocos los que han ido naciendo; y muchos los que han fallecido. Creo que cuando yo marché, hace más de 50 años, éramos casi 2000, o sea, que todos estamos entre los 50 y 60 años, salvo algún que otro nacimiento, pero estos no pararán en el pueblo.

Yo me fui el año 1958.Muchos ya se habían marchado antes.

De jovencito, mis ideas ya eran de que no me quedaría en el pueblo, ya que aquella vida del campo, segar, excavar, cavar remolacha, regar, etc., no era nada agradable, pero tuve la gran suerte, de ir a coger fruta a Calatayud y me encontré con un empleado del frutero, que resultó que nuestros padres habían hecho la guerra juntos, y habíamos tenido bastante relación, pero los anos habían ido pasando y ya no nos conocíamos. El había aprobado unas oposiciones para un banco, y estaba esperando que lo llamaran.

Encuentros en Montmelò. Blas y compañía

Encuentros en Montmelò. Blas y compañía

Dio la casualidad, que en días próximos eran las fiestas del Cristo, y se vino al pueblo. Vio que yo tenia afición por la lectura, y le dijo a mi padre, que en Calatayud había una academia, que preparaba para banca y de la que mucha gente de los pueblos de alrededor iban a estudiar. Así que de esa manera convenció a mi padre, y en menos de un mes ya estaba en una pensión con 5 o 6 personas. Había dos que trabajaban en Bancos y uno de Cervera de botones.

Fueron pasando unos cuantos meses, y en la Academia había chicos de otros pueblos que venían en bicicleta. De Aniñón bajaban dos y de Cervera uno. Total que yo me animé, y se lo dije a mi padre. El se opuso tajantemente. Que como iba hacer el trayecto

de 45 ó 50 kilómetros cada día. Pero al fin lo convencí, y un hijo de Vidal Blasco vendía una y por mil pesetas. Ya tenia una magnifica bicicleta de carrera.

Ganadores del guiñote. Ramón Vela, Vicente Chueca, etc

Ganadores del guiñote. Ramón Vela, Vicente Chueca, etc

Seguí yendo a la pensión donde dejaba la bicicleta e iba a comer pero con fiambrera.

Al poco tiempo, pensaba que me había equivocado, pero no quedaba más remedio que continuar.

Así que cada día a las I de la mañana, ya estaba en marcha. En el alto de Aniñón, nos esperábamos un rato hasta que estábamos todos, pero si en un plazo prudencial alguno no se presentaba continuábamos la marcha.

Mirando jotas en Montornes

Mirando jotas en Montornes

La vuelta no era como la mañana. Tres o cuatro Km. de la salida de Calatayud eran llanos, pero llegábamos a Los Ríos, y allí ya empezaba la cuesta. Desde Torralba hasta el alto de Aniñón era el trozo que había que poner todas las fuerzas. Luego venia un trozo hasta CERVERA, y desde allí todo era cuesta.

Había días que nos cogía la lluvia y nos teníamos que meter en alguna cabaña. Algunos días si hacia mal tiempo, cogía el coche de línea o el tren. Hubo una temporada que me acompañaba JESUS MELENDO CHUECA, que también estudiaba para telégrafos. Hice oposiciones en Bilbao y aprobé. Me destinaron a Mataró.

Allí estuve 3 años y medio, incluidos un año y medio que hice de mili en Zaragoza. En Mataró estuve de pensión, pero sólo a dormir. Comíamos en una casa de comidas, donde nos reuníamos con algunos de otros bancos. Cenar también íbamos allí.

Joteros en Montornés

Joteros en Montornés

Llegaba el sábado, y cogía el tren y para Barcelona. Allí pernoctaba en casa de mi primo Vicente, y también vivía Lorenzo.

Como éramos varios primos siempre salíamos juntos. El punto de reunión era el Centro Aragonés, donde hacíamos nuestras partidas de cartas, muchos chicos que habíamos salido de la Academia Izquierdo, pasábamos allí muchas tardes. Y así pasábamos el tiempo.

Luego nos fuimos esparciendo, ya que algunos salían con amigas, y muchos pedían traslado a otras ciudades.

Los primeros años todos vivíamos realquilados, ya que muy pocos o casi ninguno podíamos comprar vivienda. Con el paso de los años fueron comprando las viviendas.

Y fueron pasando los años. Y ya casados vinieron los hijos, y las reuniones con la familia eran frecuentes, ya que el nivel de vida no permitía hacer dispendios. A medida que fue pasando el tiempo, compra de coche y más salidas.

Celebrando  en Montornés 1987 con  el alcalde de Villarroya

Celebrando en Montornés 1987 con el alcalde de Villarroya

Jotas  Montornés1987

Cantando jotas

los musicos amenizaban la jornada

los musicos amenizaban la jornada

En los años 80, empezamos a organizar reuniones por el campo, y cientos de villarroyenses pasábamos un día maravilloso. Montornés era el lugar elegido. Allí nos encontrábamos con paisanos que durante el año no veíamos.

Partidas de cartas, bailes, rondallas de jotas etc. Bueno, fueron unos cuantos años que no se olvidan. Pero todo llega su fin, y todo esto dejó de organizarse, y por consiguiente las visitas con los del pueblo acabaron. Ahora, y con pena, acostumbramos a vernos en los entierros.

Disfrutando el día y la compañía

Disfrutando el día y la compañía

Por todo ello, quiero por si alguno quiere recordar a sus paisanos y familiares, algunos vivos, pero muchos ya muertos, como ya he indicado antes, no todos llevarán el nombre o el apellido correcto, ya que ha sido una larga tarea poder confeccionar este listado. Doy gracias a todas personas que me han facilitado nombres apellidos de gente que yo no recordaba, y especialmente, al Secretario del Ayuntamiento que me aguantó unas horas buscando en los archivos.

V E A MO S:

DONAGUEDA, ADELA

ZARO DOÑAGUEDA, DIONISIA

ZARO DOÑAGUEDA, JOSE

ZARO DOÑAGUEDA, CARMEN

ZARO DOÑAGUEDA, JOSEFINA

FRAILE GREGORIO, ERNESTINA

                                        FRAILE GREGORIO, TULIA

Cantando jotas Pascual Vela

FRAILE GREGORIO, BLANCA

                                           FRAILE GREGORIO, EDELMIRO

  CHUECA GONZALEZ, CARMEN

                   CHUECA GONZALEZ, MARIA

 CHUECA GONZALEZ, VICENTE

  CHUECA GONZALEZ, LORENZO

    CHUECA GONZALEZ, MERCEDES

CHUECA GONZALEZ, PILAR

ACON LACAL, MARIA

ACON LACAL, ASCENSÍON

ACON LACAL, SOLE

MARTINEZ REMACHA, BERNABEL

ABAD PERCEBAL, RICARDO

ABAD PERCEBAL, MANOLITA

ABAD PERCEBAL, MARIA

ABAD PERCEBAL, JOSE

CHUECA GIMENO, LUIS

CHUECA GIMENO, IGNACIO

              CHUECA GIMENO, JOSE MARIA              

CAÑON MARIN, PILAR

CHUECA CHUECA, MANUELA

CHUECA CHUECA, PILAR

SERON RUBIO, MANUEL

ACON SERON, MARIA

ARGUEDAS VILLARROYA, PILARO

CESTERO AGREDA, NATIVI DAD

Partida de guiñote con los amigos

Partida de guiñote con los amigos

ARGUEDAS CESTERO, MARGARITA

ARGUEDAS CESTERO, VICENTE

ARGUEDAS CESTERO, FRANCISCO

CESTERO PEREZ, ANGEL

RODRIGUEZ SEBASTIAN, GOYO

RODRIGUEZ SEBASTIAN, GLORIA

SEBASTIAN SEBASTIAN, MARIA LUZ

El autor , mi hermano Jose María, Pascual, Conrrado Pepe.....

El autor , mi hermano Jose María, Pascual, Conrrado Pepe…..

VELA VELA, MANUEL

VELA VELA, RAMON

VELA VELA, PASCUAL

BUENO BLASCO, MARIANO

BUENO CISNEROS, TOMAS

BLASCO CHUECA, MARIA CRUZ

BLASCO CHUECA, PILAR

BLASCO CHUECA, CARMEN

Ganadores del guiñote, Vicente Chueca y M. Serón

Ganadores del guiñote, Vicente Chueca y M. Serón

LASCUEVAS ESPIAGO, PILAR

LASCUEVAS ESPIAGO, JESUS

LASCUEVAS ESPIAGO, MARIA

LASCUEVAS ESPIAGO, DOLORES

CESTERO JIMENEZ, ASCENSION

CESTERO JIMENEZ, M

CESTERO JIMENEZ, P

CARDIEL GASCON, JOSEFINA

CARDIEL GASCON, PABLO

CARDI EL GASCON, FRANCISCO

CHAVARRIA CESTERO, JUANI

MELENDO CHUECA, JESUS

SERON SERON, MANUEL

CESTERO LACAL, JOSE MARIA

Cantando jotas Blas, Sole, Carmen....

Cantando jotas Blas, Sole, Carmen….

ARRUE TOBAJAS, PAQUITA

ARRUE TOBAJAS. EVALINA

ARRUE TOBAJAS, GEROMO

GREGORIO CHUECA, MANUEL

GREGORIO CHUECA, AMALIA

GREGORIO CHUECA, MARIA

SERON ALCALDE, JOAQUIN

MORENO BARRACO, ANTONIO

PUERTO TORRES, PM

PUERTO TORRES, SANTIAGO

PUERTO TORRES AURELIO

PUERTO TORRES, VITORINA

MORLADES, JOSEFINA

LAMATA ACON, J

Matías Marco y compañía

Matías Marco y compañía

GREGORIO VELA, DOMINGO

MARIN ACON, PABLO

MARIN ACON, TERESA

MARIN ACON, VICENTA

MARIN ACON, PEPE

SERON VELA, JOSE

SERON VELA, ALFONSO

SERON VELA, CARMEN

LAMATA GREGORIO, PASCUAL

LAMATA GREGORIO, LUIS

LAMATA CESTERO, PILAR

LAMATA CESTERO, JOSE

LAMATA CESTERO, PATERNO

POLO SEVILLA, PAQUITO

POLO SEVILLA, NARCISO

MARCO HERNANDEZ, PILAR

CABRERIZO TOMAS, TOMAS

Comiendo en Montornés los Serón Cobos y amigos

Comiendo en Montornés los Serón Cobos y amigos

CABRERIZO TOMAS, SARA

RUBIO SANCHO, CARLOS

RUBIO SANCHO, JOSE LUIS

RUBIO SANCHO, MARIA FE

RUBIO SANCHO, CARMEN

PEREZ CESTERO, PILAR

TOBAJAS GASCON, MARIA

CHUECA MILLAN, ELOY

CHUECA MILLAN, RAFAEL

CHUECA MILLAN, MICAELA

CHUECA MILLAN, ANGELITA

LAMATA ESPIAGO, ISABEL

LAMATA ESPIAGO, PASCUAL

CHUECA LAMATA, ADELA

SERON CHUECA, FRANCISCO

SERON CHUECA, JOSE MARIA

SERON CESTERO, MARIA JOSE

CESTERO MARTINEZ, TRINIDAD

GONZALEZ DE AGUERO CHUECA, PA

GONZALEZ DE AGUERO, PASCUAL

ARANDA CISNEROS, MANUELA

ARANDA CISNEROS, ROSARIO

SERON FRAILE, LUIS

GARCIA ROMERO, FUENCISCO

GARCIA ROMERO, CONRADO

GARCIA ROMERO, ELOISA

GARCIA ROMERO, DOLORES

GONZALEZ DE A. TIERRA, GERMINAL

GASPAR LASCUEVAS, GERMAN

GASPAR LASCUEVAS, ELENA

SANJUAN LASCUEVAS, CARMEN

SERRANO I BAÑE Z, FEDERICO

SERRANO IBAÑEZ, PASCUAL

YAGUE PORTERO, JESUS

MILLAN MILLAN, TERE

MILLAN MILLAN, PAQUITO

YAGUE MILLAN, JESUS

YAGUE MILLAN, BELEN

MOROS BECERRIL, ANTONIO

LAGUNA ACON, PASCUAL

LAGUNA ACON, LUISA

LAGUNA ACON, PURA

GIL ROMAN, JOAQUIN

SEVILLA CESTERO, CORAL

SEVILLA CESTERO, AMPARO

CESTERO SERRANO, JOSE

CESTERO LASCUEVAS, JOSE MARIA

CESTERO LASCUEVAS, JULIAN

CESTERO SERON, MARIA CLOTILDE

GARCIA CALONGE, AURORA

CESTERO VALDEON, RUPERTO

VELA MARTINEZ, JERONIMO

VELA MARTINEZ BLAS

VELA MARTINEZ,MARIA

VELA MARTINEZ, ROSARIO

VELA MARTINEZ,LUIS

MARTINEZ PEREZ, MARIA ROSA

MARTINEZ PEREZ, ENCARNA

MARTINEZ PEREZ, RAFAEL

GONZALEZ DE AGU ERO, RICARDO

SERRANO LADRON DE G., PASCUAL

SERRANO LADRON DE GUEVARA, R.

SERRANO SEGURA, ARMANDO

SERRANO SEGURA, RAUL

GIMENEZ CESTERO, VISITA

ALCALDE SERRANO, MANOLO

ALCALDE SERRANO, JOSEFINA

LASCUEVAS REMACHA, CRISOSTOMO

ESPIAGO SERON, SALUSTIANO

ESPIAGO SERON, MANUEL

ESPIAGO SERON, JOSE

POLO CESTERO, PASCUALA

GARCIA MINGUEZ, MARIA

LOPEZ PEREZ, TEODORO

LOPEZ PEREZ, ANTONIO

CESTERO MANCEBON, MANOLO

CESTERO MANCEBON, ANITA

PEREZ MILLAN, SAURO

GARCIA BARRANCO, MANOLO

BLASCO MARTINEZ, ROBERTO

BLASCO MARTINEZ, TERE

BLASCO MARTINEZ, AMELIA

BLASCO MARTINEZ, LUIS

LAGUNA ABAD, ANDRES

TOBAJAS MARCO, FELIX

TOBAJAS MARCO, MANOLO

TOBAJAS MARCO, ESPERANZA

TOBAJAS MARCO, PASCUALA

MARCO IBAÑEZ, FELIPE

MARCO IBAÑEZ, ALBERTO

MARCO IBAÑEZ, NURI

MARCO IBAÑEZ, CARMEN

IBLASCO MARCO, MARIA

BLASCO MARCO, GUILLERMO

PETALO GARCIA, AGUSTIN

JOVEN CISNEROS, LIDIA

GIMENO SEVILLA, PACO

GIMENO SEVILLA, MARIA

MILLAN CESTERO, JACINTO

GIMENEZ MARIN, JOSE RAMON

LAGUNA GARCIA, ANGEL

LAGUNA GARCIA, RAFAEL

SERON GARCIA, CONSUELO

LOZANO SRBASTIAN, PILAR

SERON MARCOS, P

CESTERO BALDEON, RUPERTO

LOZANO SEBASTIAN, PACO

LOZANO SEBASTIAN, EUSEBIO

GALLARDO GARCIA, AGUSTIN

GALLARDO JOVEN, MARIA TERESA

GALLARDO JOVEN, MANUEL

SEBASTIAN ESPIAGO, PATRO

MOROS CORTES, YOLANDA

SERON VELA, JOSE RAMON

SERRANO ARANDA, JOSE MARIA

SERRANO ARANDA, DAMASO

ARANDA, GREGORIA

ACON LECUMBERRI, JESUS M.

GALAN, FRANCISCO

LASHERAS GIMENEZ, ANGELES

CESTERO CABALLERO, LUIS MIGUEL

CESTERO LAGUNA, MIGUEL

CESTERO LAGUNA, PACO

VELA MILLAN, MIGUEL

VELA MILLAN, JESUS

RAUSEL MARQUINA, JOSE MIGUEL

GIMENEZ CESTERO, ANGEL

REMACHA GIMENEZ, ANGEL

IMARCO IBAÑEZ, MARIA

MARCO HERNANDEZ, MATIAS

LASCUEVAS ROMERO, CONSUELO

SERRANO MARCO, FELISA

SERRANO MARCO, JOAQUINA

SERRANO MARCO, AGUSTIN

SERRANO MARCO, MARIA

MILLAN ESTEBAN, ROBERTO

REMACHA CALVO, ASUNCION

VELA GREGORIO, JOSE MARIA

SERON MARCO, ANTONINA

SERON MARCO, MERCEDES

REMACHA LASCUEVAS, CONSUELO

SEVILLA MILLAN, TERE

MOROS CARDIEL, YOLANDA

LAMATA ACON, MANUEL

LAMATA ACON, ISABEL

LAMATA ACON, MARIA

GARCIA SEBASTIAN, ANGEL

BARBERO CHUECA, ISABEL

PEREZ JOVEN, MANOLO

MARCO GARCIA, PILAR

MARCO GARCIA, GOYA

MARCO GARCIA, SANTOS

MARCOS GARCIA, CONSUELO

MARCOS GARCIA, PABLO

ACON ACON, MARIA

ACON ACON, MARCELINO

ACON ACON, BLAS

MARTINEZ, ANGELITO

GASCON BARBERO, JOSE

GASCON BARBERO, AMELIA

MARTINEZ GARCIA, PASCUAL

MARCO IBAÑEZ, ANGELITA

LOPEZ GARCIA, DOLORES

LOPEZ GARCIA, CONCHA

I

LAGUNA DE GRACIA, BERTA

GALLARDO, MARIA

ACON GALLARDO, ANGEL

ACON GALLARDO, PILI

ACON GALLARDO, JESUS

ACON GALLARDO, JOSE

GIMENO LASHERAS, MIGUEL

GIMENO SOLANAS, MIGUEL

GIMENO SOLANAS, ISABEL

GIMENO LASHERAS, LUIS

GIMENO LASHERAS, JOSE

GIMENO SEBASTIAN, JULIO

GIMENO SEBASTIAN, ANTONIO

GIMENO SEBASTIAN, EUSEBIO

GIMENO SEBASTIAN, ESPERANZA

GIMENO LASHERAS, ANITA

POLO NARVION, EDUARDO

CHUECA CAÑON, JOSE LUIS

YAGUE CESTERO, M

GASCON NARVION, JOSE

CESTERO LASHERAS, BENITA

GREGORIO VELA, VICENTA

Como ya he detallado antes, hay personas que físicamente conozco, pero que no recuerdo los apellidos. Si esta hoja llega a su poder, y quieren figurar, no tienen más que avisarme.

Espero que este escrito haya sido de vuestro agrado, y poder recordar a todos cuantos dejamos a nuestro querido pueblo de

VILLARROYA DE LA SIERRA.

Muchas gracias.

                               Francisco Seron Chueca

Villarroya de la Sierra

Situado en el Km. 20 de la carretera Calatayud a Soria, y lindante con los municipios de Cervera de la Cañada, Aniñon, Moros, Villalengua, Torrijo ,Bijuesca, Jarque y Aranda del Moncayo, se encuentra el bonito pueblo, que aunque su nombre indica, SIERRA, no está en una sierra si no en un valle.


Vista de la Torre de Villarroya

Consta de 2.l70 habitantes, digo consta, aunque en realidad sean muchos menos, debido a la emigración emprendida hace cosa de unos 10 ó 15 años, ya que no fueron pocas las familias enteras que se marcharon de su pueblo a las grandes capitales, aunque con lágrimas en sus ojos, al dejar ese trozo de tierra, donde habían nacido y donde sus antepasados habían sido enterrados.

Vista de la Torre de Villarroya

El pueblo está bastante extendido, y sus calles más notables son la carretera que atraviesa todo el pueblo, con la plaza y donde están situadas las mejores casas. Otras calles muy conocidas son: REAL BAJA y REAL ALTA, ya que estas dos calles juntas atraviesan todo el pueblo. También es conocida la llamada AVENIDA VIRGEN DE LA SIERRA (antes Torruntero ) , son asimismo muy conocidas SANTA MARIA SANTA CATALINA y SOMONTANO.

En las afueras, donde terminan las casas, empiezan los corrales, destinados para
cobijar los animales domésticos, gallinas, conejos, cerdos etc. Tan indispensables en los pueblos; y a continuación son las eras con sus pajares las que ocupan los extrarradios.
Antiguamente el pueblo estaba amurallado, como lo demuestran las almenas y muros que todavía se conservan por varios sitios del pueblo.
Son de destacar a este respecto, el Castillo del Rey y el de la Reina, que ya van pesando sobre sus espaldas los siglos de existencia y ya comienzan a derrumbarse parte de sus estructuras por la parte más alta, como anteriormente lo hicieron las murallas que rodeaban su entorno y que sólo el trozo de muralla donde estaba la puerta sigue erguida.

Vista de la Iglesia de Villarroya de la Sierra
Sus casas construidas la mayoría por el típico adobe, dejan a veces al descubierto paredes derruidas por las lluvias y vientos, pero a pesar de no ser un pueblo como los de algunas otras provincias, también tiene su encanto, ya que el trozo que discurre la carretera general, bien se puede comparar como un gran pueblo.
En invierno, se nota la alegría que reinó durante el verano, pero a medida que los meses estivales se marchan, una tristeza invade a los pueblos, que se recogen a la espera que de nuevo llegue la primavera y vuelva la alegría. En esta época, la gente se recoge en los varios cafés y bares, charlando y jugando sus partidas de guiñote, mus, subastado u otros juegos.

Costumbres

Cuando nevaba e Villarroya, recuerdo que salíamos a las eras y formábamos grandes bolas que después despeñábamos por las cuestas abajo y nos emprendíamos a bolazos.
Llegaba el mes de Enero, y ya los hombres de Villarroya marcaban al campo, bien a podar las viñas o excavar, por la tarde se veían a las caballerías cargadas con las gavillas de sarmientos para hacinar en la sarmentera.

El día de SAN ANTON, una costumbre que todavía perdura, pero no con la intensidad de antaño. Yo recuerdo que todos los chicos que aquel día no parábamos un momento en toda la mañana, acarreando leña que la gente daba.
Había un dicho muy conocido, que decía, que por cada caballería había que quemar una gavilla, ya que si no se hacía el dueño que no la quemaba, a su caballería le daba TORZON. Mi abuelo hasta sus 89 años, era el que cada año a las siete de la mañana, prendía fuego a la hoguera, y en su juventud decían que había arrollado a un hombre cuando estaba dando la vuelta a la hoguera causándole graves heridas.
Los chicos jubilosos, gozábamos viendo surgir las llamas del montón de leña acumulado y son sentíamos henchidos de gozo por haber aportado nuestro granito de arena.

Vista del estanque

Después de SAN ANTON llegaba SAN BABIL, y también era festejado con grandes hogueras, esta vez ya  no era una hoguera general si no que se  extendían por la mayoría de las barriadas del pueblo, pero había 4 ó 5 barrios, entre las que existía un gran pugilato entre ellos, para ver quien hacía la hoguera más grande. Estos barrios eran: SANTA MARIA, SOMONTANO, FRONTON y LA DULA, y tal vez algunas más pero de menor importancia.
Como 30 ó 40 días antes del santo, ya las cuadrillas de cada barriada, provistos de azadas y cuerdas, marchábamos al campo donde las aliagas y óntinas eran arrancadas y después de prepararlas en fajos para transportarlas, las guardábamos en casillas, donde quedaban secretamente escondidas.
Para tener la noche de la quema gran montaña de leña, por la noche se saltaban las sarmenteras donde los más atrevidos se subían a ellas y echaban varias gavillas que pasaban a los escondites. Había veces, que después de haber estado recogiendo durante varios días, los de otras barriadas asaltaban la casilla y se llevaban la mayoría de la leña allí guardada. A causa de esto se originaban algunos altercados entre los componentes.
La noche de SAN BABIL, era de gran bullicio en todo el pueblo, después de la cena se prendía fuego y se saltaba y corría alrededor de la hoguera. Luego se hacia un recorrido por la mayoría de los barrios para ver cual había sido la más grande.
También para el invierno, en los días soleados y días de fiesta, por la tarde, eran las eras donde nos reuníamos la mayoría de cuadrillas de chicos, donde bien organizábamos juegos y a veces a las cartas Había algún amigo que tenía casa desocupada y también se organizaban juegos y meriendas, y de esta manera se pasaba el invierno.
Con la llegada de la primavera, todo parecía alegrarse, los campos reverdecían por todos los sitios, los árboles empezaban a brotar y se cubrían de flores. Los pájaros lanzaban sus alegres trinos de ver la naturaleza en todo su apogeo de brillantez.
Tirando a la parte atrás del pueblo, saliendo por las Escovachas, se encuentra La carretera de la Virgen, ¿ quién no ha ido a la Virgen?, pues yo creo que todos los del pueblo han alguna vez.

La Virgen de la Sierra

La Ermita – Santuario, donde está la Virgen de la Sierra, se encuentra a tres horas de Villarroya de la Sierra, y a 1655 metros de altitud sobre el nivel del mar. Es venerada por muchísima gente, ya que no son sólo los de Villarroya quien a ella se postran y de ella confían, si no miles de personas de todos los pueblos de los alrededores, y que a través de los años han heredado de sus antepasados esta devoción y cariño por esta milagrosa imagen.

Ermita Virgen de la Sierra

Como ya he dicho anteriormente, la ermita se encuentra a 1655 metros de altitud. Es un espectáculo mirar desde este montículo; Villarroya de la Sierra, Aranda, Malanquilla, Clarés, Jarque, Gotor, Oseja, etc., Son muchísimos pueblos que se divisan desde su cumbre; también en días claros, aunque en contadas ocasiones se pueden ver los Pirineos.
Los días señalados en que se sube en romería a la ermita, el 25 de Abril, festividad de San Marcos, Pascua de Pentecostés y Santo Cristo del Consuelo. Estos días son para los de Villarroya. Añón subía el día 20 de Pascua; Cervera, el día de San Felipe y Santiago; Oseja, el lunes siguiente al domingo de la Trinidad; Jarque el día 9 de Mayo; Gotor el día 12 del mismo mes; Aranda el día 2, Pomer el día 8; Malanquilla el día 1 de Junio, Clarés, etc. día de San Gregorio y Calatayud el 19 de Septiembre.

Celebración dia de Pascua

Además de estos días señalados, son muy frecuentes los particulares que se organizan en acción de gracias.
El recorrido hasta la ermita es largo, pero uno puede gozar, de ver desde los pocos metros de la salida del pueblo, a ambos lados de la carretera, viñedos resplandecientes, con sus verdes pampanos y colgando de los mismos los racimos de uvas. Desde Valdemingón, o sea donde ya comienza el monte, aunque años antes, había sido cultivado lo que ahora son pinos, hasta bien cerca del Salcedo. El Salcedo se encuentra a mitad de recorrido, con un refugio para el Forestal que vigila el monte,. Y es un lugar indispensable para estirar las piernas si se va montado o bien para almorzar.
Desviando a la derecha y como cosa de medio Km. Se encuentra el vivero del Salcedo, que hoy día se cuida el Patrimonio Forestal del Estado de su explotación, bueno, explotación creo que no, ya que lo único que hay son unas parcelas de terreno destinadas a viveros de pinos, aunque hoy día no son muchas, ya que la repoblación por este termino ya hace años que se acabó. A este lugar se puede hacer una visita a la bajada de la Virgen, pues a veces hay necesidad de remojar la garganta y es el único sitio que se puede encontrar agua, o bien por que se desee seguir el camino hasta la salida en Mailipe.
Los que hacen el viaje a pie, poco después del Alto de las Coronas, ya cortan por un atajo, que va a parar a la Fuente El Espino. Esta fuente que mana 30 cántaros al día, en años de sequía sale el mismo caudal. Aquí si que es obligación de hacer una parada y beber dos vasos de agua fresquita.
La pila está metida debajo de una roca, protegida por una pequeña cabaña, para evitar que los animales puedan entrar. En el año 1964 se construyó una larga pila, para que el agua que salía cuando se llenaba el depósito y se perdía en una charca, se aprovechara, para poder abrevar las caballerías e incluso el ganado en casos necesarios.
Y desde la fuente El Espino, ya son diez minutos de cuesta que se suben un poco jadeantes para llegar a la explanada del santuario, donde uno ya puede respirar a placer aire puro y dedicarse a contemplar el agreste paisaje que desde la cumbre se divisa. Aranda, por ser el más cercano , es uno de los pueblos que mejor se ve, con su exuberante vega, circundada en sus alrededores por el secano, en el que descuellan los corrales o majadas para el ganado, aunque ahora son muchos de estos cobertizos los que están en ruinas, por no ser tan utilizados como antaño. También se divisan por este mismo lado Jarge, Gotor, Oseja, etc., y, como no, la inmensa mole del MONCAYO.
Es costumbre que una vez en la cima se dé una vuelta al santuario. La entrada al santuario, tiene un amplio portal y a continuación un largo patio. A la misma altnira de la entrada y a mano izquierda, se halla cocina del pastor, y a continuación la escalera principal, con paso a los establos y aljibe. Mas adelante también hay una escalera donde hay o había unas amplísimas habitaciones, conocidas como LAS MARGARITAS.
A continuación la entrada a la iglesia, donde enfrente hay un pequeño altar con la imagen del Santo Cristo del Consuelo y San Saturio. Encima está el coro, en el que por un pequeño ventanuco, hay dos días al año, en el que penetra el sol y pega a la cara de la virgen.
Todavía quedan restos de lo que fue grandeza y quedó aprovechable alguna columna, en la que descansan arcos incompletos que se alzaron esbeltos en la iglesia en los tiempos de esplendor. La pila bautismal en piedra labrada con arte; el vía crucis en azulejos muy curiosos; una campanilla para ayudar a misa, obra de hace cinco siglos.
Muchos fueron los que cumpliendo promesas, llegaron hasta el santuario, desde localidades diferentes, para subir descalzos, hiriendo sus pies con los guijarros sueltos del sendero.
La ermita constaba de 365 habitaciones, o sea tantas como días del año; ¿Pero cuántas hay ahora? Yo creo que ninguna, al menos en buen estado, y a no tardar mucho las que quedan que están en situación bastante mala, serán ruinas si no se toma alguna medida para salvar esta herencia que los mayores nos legaron, esperemos que la mano del hombre se decida a poner de su parte lo necesario, para poder conservar lo que fue y sigue siendo orgullo de todos nosotros.
Se intentó, durante el mandato como alcalde de D. Vidal Blasco, poner remedio a esta situación, para ello se dieron funciones de teatro por los aficionados para recaudar fondos, la mayoría del pueblo se hizo socio protector para pagar desde 5 a 25 pesetas al mes, pero fue un fracaso, ya que si en parte se hizo una obra, que es la bóveda que se levanta encima de la capilla.
que gracias a esta obra no se derruyó, ya que las goteras que empezaban a filtrarse amenazando la capilla, pues bien, lo que podía haber sido una ayuda con muy poco trabajo, se desperdicio. O sea que todos que nos hicimos socios protectores, no fuimos molestados para el pago ni tan sólo una vez.
En el año 19.. después de haber estado todo el día los romeros en la ermita, el Santero a la madrugada se dio cuenta que había fuego, El fuego alcanzó grandes proporciones y se temió en un principio que ardiera todo, ya que la distancia que había hasta el pueblo serían varias horas entre bajar a avisar al pueblo y subir. El santero, creo que era JOSE SERÖN (Pintalá), bajo corriendo al pueblo, el cual llegó en menos de una hora, cuando se necesitan casi tres horas a buen paso.
Todo el pueblo se puso en marcha, su más preciado tesoro se les quemaba. cuentan que ya el incendio se extendía por cerca de la capilla, por lo que la imagen de la virgen fue sacada a la era, así como sus ricos mantos. Y después de muchos esfuerzos se pudo sofocar el incendio. Las consecuencias fueron funestas, casi las dos terceras partes del Santuario fue destruido. Se dijo que si unas personas que habían estado haciendo la comida en una cocina, al hacer el fuego se había extendido a unas vigas interiore de la chimenea y debido al viento que normalmente hace, se propago rápidamente.

Y esta es la versión que yo he sacado de oír a unos y otros, aunque no he preguntado a personas mayores que quizás ellas hubieran estado más enteradas por haber vivido el suceso.
Pero lo cierto es que por una imprudencia, nos quedamos sin la mayor parte del Santuario y como consecuencia de ello hubo que hundir algunas habitaciones para conservar otras.
Se dice que FERNANDO EL CATOLICO, pernoctó en la ermita cuando fue a pedir la mano de Isabel de Castilla.
En el año 1947 , hubo una gran fiesta, era el día de SAN PEDRO, el Regimiento de Artillería de CALATAYUD, también se sumó a la fiesta, llenando el pueblo con sus pesados camiones.
Quienes todavía éramos unos críos, aquel alboroto nos daba un poco de miedo, tal vez al ver a los uniformados soldados y jefes, creyendo que algo iba a pasar, sí, algo pasó, la mayor peregrinación que jamás he visto en mi vida en el santuario. De todos los pueblos de los alrededores acudieron muchas personas. Fueron adornados los alrededores del Santuario, presentando un magnifico aspecto y la fiesta fue de las que se recuerdan siempre. Si el día fue de una gran fiesta, también de la noche guardamos los de Villarroya un recuerdo, pero no de alegría si no todo lo contrario; las FUERZAS de Artillería habían dejado unos bidones de gasolina en el patio del Ayuntamiento, y al parecer, alguien tiró una colilla de tabaco y la cuestión fue que hubo uno de los incendios más devastadores que se recuerdan en el pueblo. Las llamas alcanzaron gran altura, y la fachada de la Iglesia se veía toda ella resplandeciente debido a su cercanía con el Ayuntamiento, parecía como si también fuese a quemarse. Gracias a que todo el pueblo colaboró al máximo y también los bomberos de Calatayud, no hubo que lamentar grandes daños y, aunque el incendio parecía que iba a destruir los archivos por la gran proporción que tomó, no alcanzaron la gravedad que en un principio se temió.
Bueno, he explicado la descripción de la ermita, pero he quedado cortado de cuando la gente sube a la ermita y que es lo que hace.
Es costumbre que una vez llegados a la cumbre, lo primero que se hace es dar la vuelta a la ermita. Y después de entrar a ver la virgen, se acostumbra a ver la casa, las habitaciones, salones, cocinas, que hace años cuando todavía había un santero permanente se conservaban en perfecto estado, hoy todos sabemos como están. También es un aliciente subir a tocar el campanillo, últimamente era peligroso voltearlo, ya que se corría el riesgo de que se cayera y para hacerlo sonar se tiraba del badajo. Y una vez recorrida la casa, se hace una visita por los alrededores. Una distracción de los jóvenes es el “rodaculos» donde con un poco de suerte sales con el culo al aire.

Se acerca la hora de comer innecesario es decir que aquí se despierta un apetito, que aunque en las alforjas se lleva en abundancia, la mayoría de las veces se hace corto, y ya no digamos de beber, porque coger la bota y beber el delicioso vino de nuestro pueblo, es como si no pudieras apartarte de una fuerte atracción, y es que el aire de esta sierra, abre las ganas de corner….y de beber.

Se organizan juegos, se baila, se corre, en fin, se pasa un día maravilloso. E inevitáblemente llega la hora de la despedida. Todos, en grupos, se entra en la capilla donde generalmente son las mujeres las que rompen el silencio con unas sencillas canciones, pero que llenan de emoción.

Son coplas populares estas que dicen:


VIRGEN SANTA DE LA SIERRA
SOLO DOS COSAS TE PIDO
QUE NOS GUARDES LA SALUD
PARA VOLVER OTRO AÑO.
SI TUVIERA MIL PESETAS
TE REGALARIA UN MANTO
PERO COMO NO LAS TENGO
TE FELICITO EN TU SANTO.

Y como estas podría escribir muchísimas. Hay otras que con un poco de humor, los jóvenes suelen cantar:

VIRGEN SANTA Y DE LA SIERRA
A ESTE CERRO HEMOS SUBIDO
PARA QUE NOS BUSQUES NOVIA
POR QUE SI No ESTAMOS PERDIDOS.

Son innumerables las canciones que se cantan, muchas aprendidas desde pequeños y que siempre perduran. Y otras que con un poco de ingenio se improvisan en el acto.
La hora de la marcha ha llegado. Unos andando y otros montados en caballerías, se empieza el descenso que normalmente se efectúa por la Fuente el Espino, ya que se aventaja bastante en relación con la carretera. Y así se termina este hermoso día que aunque un poco cansados, no se piensa en ello, si no que por nuestra querida Virgen de la Sierra, haríamos cualquier cosa.
El santuario tubo una época floreciente. Una persona que influyó en ello fue Calixto Martínez. Era un gran devoto de la Virgen, y todos los veranos llevaba a su familia a pasar dos meses allí naturalmente que cuando se fueron haciendo mayores dejaron de acudir.
Calixto continuó con su devoción, pero pasado algunos años dejó de venir a las fiestas de la virgen. Motivo al parecer que por alguna causa naturalmente relacionada con la Virgen, se enfadó con Mosén Bienvenido, y pocas veces ya se le vio por el pueblo.
Una visita importante fue la de CARMEN POLO, esposa del Caudillo FRANCO.
En un viaje que dicha señora efectuó por algún pueblo de la comarca, recaló en Villarroya, calles adornadas, niños con banderitas, arcos de flores, el niño Ángel Solanas Sisamón le leyó la bienvenida.
Creo que alguna de sus damas de compañía debía de ser familiar de alguien del pueblo.
Total que la embarcaron para subir a la ermita. Por aquel entonces, la carretera sólo llegaba hasta la balsa, y desde todavía quedaba un km. Y medio o dos y todo cuesta arriba. Total que la buena señora maldijo el día en que la llevaron allí.

Ya que según oídas dijo:“Que si llega a  saber aquello no hubiera subido».Total que para compensarla le regalaron un manto de la Virgen, cosa que no se llegó a confirmar.
Esta  señora era muy caprichosa y abusona, ya que muchos joyeros y anticuarios fueron desplumados en sus visitas.
Por aquel entonces estaban de santeros la familia ALEJANDRO
SERÓN. Después lo hicieron VICENTE LASCUEVAS y posteriormente SEBASTIÁN MOROS y los últimos LOS PAREJOS.
También quiero reseñar, que dos personas conocidas, fueron también devotos de la Virgen. JUAN JOSE LORENTE v BERNABEL MARTINEZ REMACHA.
El primero fue periodista y escritor.¿Quién, no ha oído hablar de JUAN JOSE LORENTE? Creo que todas las personas mayores, seguro.
El Teatro lleva lleva su nombre. Pues bien este señor escribió nada más y nada menos que las zarzuelas LOS DE ARAGON ó GLORIA DEL MONCAYO, LA DOLOROSA, y algunas otras. Pero hay una obra de teatro que muy pocos conocen, que se llama EL MADRIGAL DE LA CUMBRE, una obra que situó en el Santuario, aunque no diera detalle de ello, pero los que la hayan leído  pronto caerán en que así era.

A Bernabel sí que se le conoce más, naturalmente era más joven. Pues bien, Bernabel chico fue pastorcillo en la ermita, donde sus padres ejercían de Santeros.
Ya de mayor, estudió música y canto. Se casó con MONTSERRAT CABALLE, también cantante de ópera. Quiero reseñar que en principio la boda debía celebrarse en el Santuario, para lo cual se pintó el patio, pero llegó llego el día de la boda, y donde se celebró fue en el  Monasterio de Montserrat. Nota curiosa fue, que durante todo el día estuvo lloviendo.

Y aquí doy por terminado, no todo lo que yo recuerdo de la Virgen, sino lo más relevante.

Semana Santa

La Semana Santa. ¡Qué días de recogimiento y amor se viven con la Pasión de Jesús! Pero por desgracia también esta seriedad se va perdiendo poco a poco, como ocurre en la mayoría de España.

El martes ya era día de movimiento. Se montaba el Monumento, muchos chicos acudíamos para ayudar, ya que había que sacar todas las tablas que luego montadas darían ese espectáculo dignísimo de ver, todo iluminado y las mujeres velando arrodilladas el ultimo momento de Jesús.
Por cierto, que ya el año pasado (1966) la parte alta del monumento no había sido colocada, yo pensé que como Mosén Bienvenido ya se va haciendo mayor, y quizás no hubiera habido alguna persona mayor para poder montarlo y la parte alta era un poco difícil, se optaría sólo por la baja.
El Jueves Santo, antaño, era quizás el día mas solemne. A las cuatro de la tarde empezaba el Sermón del Lavatorio, y una vez acabado este oficio se visitaba el Padre Eterno, instalado en una peana en el Hospital, para por la tarde sacarlo en la procesión; en dicho lugar entregaban a todos los visitantes un ramo de sabina o ciprés. Luego se entraba unas cuantas veces a la iglesia.
Para los pequeños su mejor rato, era cuando con una carraca o matraca entraban en la Iglesia a “matar a los judios», pues para las mentes infantiles, aquellos dos grandes soldados romanos con una lanza en la mano, se imaginaban ser los judios causantes de la muerte de Cristo.
Por la tarde, ya al anochecer, salía la Procesión. Al costado de la Iglesia se integraban a la misma el Padre Eterno, único paso que había en la Procesión y tres encapuchados con una cruz y una cadena.
Los niños pequeños al ver a tres hombres vestidos de negro y tapados con la capucha, les resultaba un poco molesto y corrían a refugiarse con sus madres; los había más atrevidos que se unían a ellos pero no siempre les salía bien, pues los encapuchados a veces les hacían correr.
La Procesión discurría por todo el pueblo, ya que abarcaba un cinturón, que saliendo de la iglesia seguía calle Real Baja, para subir por Santa Catalina, calle Barranco ( hoy Avda. de la Virgen de la Sierra), Santa Maria, para bajar por calle Real Alta, para llegar a la Iglesia.

A la salida todos los chicos nos reuníamos en la parte trasera de la Iglesia a esperar a los encapuchados, hasta el Hospital, pues siempre nos hacían correr un poco, bien por que algunos les pisaba las cadenas o por que les decían alguna cosa.
Referente a los Encapuchados, había una costumbre, que creo, aunque no estoy seguro, que todavía continua, era que para salir de encapuchado, había que solicitarlo con tres o cuatro años de anticipación, y lo curioso era que nadie se enteraba , hasta que eran reconocidos a pesar de la capucha.

Pues bien, estos jóvenes, una vez terminada la Procesión debían de subir al Santuario de la Virgen de la Sierra- cargados con la cruz y la cadena, donde el Santero les esperaba con unas buenas fuentes de arroz con leche y pastas y a las seis de la mañana debían estar de vuelta para oír el Sermón de la Bofetada.
Para mi, el levantarme a las cinco y media de la mañana y dar dos vueltas al pueblo con la gran matraca, y asistir después al Sermón y recorrer el último Vía Crucis, era algo como si sintiera una gran satisfacción por todo mi ser.

El Viernes Santo, ya era distinto, más alegre, se desmontaba el Monumento, volviendo a guardarlo para el próximo año. Después se preparaban las peanas para la procesión de la tarde. Había tres pasos, SAN JUAN, LA MAGDALENA y LA SOLEDAD, eran las imágenes que en este día de Viernes Santo, daban mayor interés a la Procesión.
Algunos años se sacaba al Santo Cristo del Consuelo, pero debido a su gran tamaño y su difícil equilibrio al transportarlo y también por la estrechez de algunas calles, desde hace algunos años tampoco figura en la procesión.

Una vez terminada la procesión con la iglesia repleta de gente, ya que durante el resto del año pocas veces se llena como este día, empezaba el sermón dedicado a la Dolorosa, y que nuestro querido párroco Mosén Bienvenido, ponía todo su sentimiento, en este sermón que año tras año perdura en este día de Viernes Santo.

El Domingo de Pascua todo era alegría y jolgorio desde las primeras horas de la mañana. ¡Cristo había resucitado!. También en este Domingo hay una pequeña procesión, que subiendo a Santa Maria, donde se preparaba un pequeño altar en una mesita, para hacer una pequeña parada, para luego bajar por Real Alta, donde en la plaza hacían su encuentro la Virgen con Jesús. Se continuaba por la calle Real Alta, y dar la vuelta a la iglesia. Y así terminaba la Semana Santa.

Pasqua de Pentecostes

Aunque este capítulo va dedicado a una de las fiestas de más raigambre del pueblo, quiero detallar antes, lo que generalmente se celebra durante el mes de Mayo.
El día tres de Mayo, era la Invención de la Santa Cruz, en procesión se encaminaba hasta el HENADO, donde se procedía a la bendición de los campos.Después normalmente era el día de la Ascensión la fiesta más próxima. Este si que es un día feliz para todos los niños que hacen su primera comunión.
Era norma que durante dos o tres meses antes, todos los niños y niñas que fueran a tomar la Primera Comunión, cada día acudieran a la Iglesia para dar el catecismo, y aquí empezaba la gran rivalidad para ver quien eran los primeros en recibir a Jesús.
El día anterior a la Ascensión, era de gran movimiento para los niños, con grandes cestos se recorrían los huertos donde había flores. Había rosales que sus dueños no autorizaban para entrar a coger, pero siempre tenían algún descuido y los más atrevidos saltaban la tapia y entonces no dejaban una flor en el rosal, dando un
disgusto a su dueño al ver que aunque no había accedido por su propia voluntad, igualmente habían desaparecido sus hermosas rosas. Pero… que remedio quedaba si no aguantar, ya que las flores iban a servir para adornar la iglesia, en un hermoso arco de todas clases de flores, por donde iban a pasar los niños llenos de emoción a recibir por primera vez a Jesús Sacramentado.

También hace unos años era típico el día de San Pascual. Al Santo se le ponían toda clase de cosas, conejos, pollos, ramos de manzanas. etc. Luego era subastado. Por la tarde gran baile en las eras del Henado. Se bailaba a los acordes de la banda de música y hasta que anochecía duraba esta fiesta. Ya hace tiempo que esta tradición se perdió y aunque todavía hay años que se celebra una pequeña fiesta,
su popularidad de antaño se ha perdido.
Y ya llegamos al día en que todos los del pueblo esperan con gran impaciencia, el día de su patrona. La Pascua de Pentecostés.
Este día es quizás el de más esplendor en cuanto a las fiestas que se celebran.
Días antes se celebra la Novena, que sin lugar a dudas es la que más gente asiste.
En este día tan solemne, después de la santa misa, se recorre en una pequeña Procesión de aproximadamente unos trescientos metros, desde el comienzo de la calle Real Alta, para ir a salir a la casa Grande, por la plaza, innecesario es decir que la imagen que se lleva es la de la virgen de la sierra, que es llevada en una peana, al igual que antes se ha descrito para san Pascual, llena de regalos.
Quizás por la implantación a la virgen de esta tradición, perdió la suya San Pascual, ya que como la diferencia de días para su celebración es muy corta, la gente del pueblo se tira más por su patrona que por el santo y muchos que ponían al santo después lo guardaban para la Virgen.
Una vez terminada la Procesión, se procedía a la subasta, ahora un conejo, después un pan, un ramo de manzanas, en fin gran cantidad de cosas. Dato curioso es que muchas personas compraban lo que habían puesto, y a veces tenían que entablar una reñida puja con algún contrincante que también quería comprarlo.
En el casino Agrícola se celebraba un animado baile vermú amenizado por una orquesta.

Por la tarde nuevamente se sacaba a la Virgen para terminar de subastar lo que había quedado de la mañana, mientras la banda de música iba interpretando sus bailables para los niños, digo para los niños, y es cierto que únicamente era para ellos, ya que no se por que causa, pero aunque la música tocaba por la mañana y tarde, los mayores no bailaban y únicamente 1o hacían por la noche, una costumbre un poco rara, ya que en los pueblos de alrededor, basta con que en la plaza tengan baile, para acudir a la primera pieza a bailar. Digo que es rara, pues cierto que tanto en invierno como en verano, al baile de la Pista de Jesús Martínez, no se acudía antes de las ocho, claro que los perjudicados eran los jóvenes, pues contra más tarde se va, menos se bailaba.
Pues bien, en este día de Pascua, después de haber bailado por la mañana en el Casino, por la tarde en la Pista, por la noche se acudía al de la plaza y una vez terminado aquí, los que eran socios del Casino, nuevamente empezaban la danza que habían dejado hacía unos momentos. Y aquí se bailaba hasta bien entrada la madrugada, terminando la velada con unas movidas piezas que hacían sudar de lo lindo, pero para la juventud aquello era lo suyo.
Después de terminado el baile en el Casino, muchas cuadrillas de jóvenes, marchaban a visitar los bares y otras organizaban rondas, y de esa manera pasaban el tiempo en espera de la hora de salida para el Santuario de la Virgen de la Sierra. Y otros una vez finalizado el baile, marchaban al santuario andando.
Los preparativos para la marcha, tenían su aliciente, ya que por todas las calles se veían caballerías enjaezadas con cabestros y collares que únicamente en estos días. Las mujeres corrían de un lado para otro, preparando las alforjas y demás utensilios necesarios, pues aunque se procuraba que nada faltase, a la hora de la comida siempre faltaba algo.

Una vez en el Santuario, todo era jolgorio, pues normalmente, los de los pueblos de alrededor solían llegar antes que los de Villarroya, y eran los primeros en organizar los corros. Después se acudía a la Santa Misa y a la salida la banda de música, desgranaba sus notas en la explanada de la era. Inenarrables son las estampas que entre todas las cuadrillas de jóvenes podían contemplarse. Y tampoco faltaban muchos mayores que, llegada la hora del regreso, los había que muy temprano emprendían la vuelta, y otros que habían subido en algún camión se podían permitir estar hasta bien entrada la tarde.
En el día de Pascua, era costumbre al salir a las Escovachas a esperar a los que habían ido a la Virgen, y naturalmente la mayoría eran niños que con sus madres acudían en espera de la llegada de su padre o tíos, quien les daría los correspondientes caramelos. Así que a primera hora de la tarde se llenaba de gente, había mesas con caramelos y se jugaba a los carteles y a eso de las seis los más tempraneros empezaban a llegar, pero cuando era emocionante la espera, solía ser cuando los jóvenes montados en caballos y mulas hacían su aparición por la cerecera en gran carrera, naturalmente eran los que montaban en caballos los que mejor corrían. A su paso por donde se arremolinaba la gente, tiraban los caramelos que niños y mujeres se abalanzaban en busca de los dulces. Esta costumbre casi se ha perdido. Por la noche y como cierre de esta gran fiesta, un animado baile en la plaza, pero la mayoría, cansados de trotar por la sierra, no tenían muchas ganas de bailar, pero los había que todavía cuerda para rato y seguían con la juerga.

Parajes

Saliendo por la parte de arriba de Villarroya, o sea por la carretera a Soria, es quizás la parte del campo más alegre, ya que dejando atrás la posada y la casa del médico, ya casi se está en pleno campo, con vega a ambos lados, aunque es a mano izquierda donde están las fincas mayores, ya que al lado opuesto, normalmente son trozos que un día formaron parte con la de abajo, pero que fueron separados al formar la carretera de Villarroya.
Cara Soria y Molino Bajo, es llamado este paraje, aunque hay quien llama a las primeras fincas, EL CAÑO , LOS PINGONES y EL PUENTE LA CHORRUMBA. El Molino, hasta hace tres o cuatro años, propiedad de los Marquinas, que lo vendieron a uno de Calatayud. Esta es una de las fincas más alegres del pueblo, ya que además del molino, consta de gran casa con amplias habitaciones, tierras alrededor y estar a un km. del pueblo y a pie de la carretera general. Esta casa fue la primera que tuvo agua corriente procedente de un pozo en Río La Vid, que había sido construido por la familia Marquina, obra que algunos Ingenieros no pudieron hacer y en cambio un hombre entusiasta, supo concluir una obra tan difícil. Este pozo fue vendido a RENFE, para su utilización en la estación del pueblo , para suministro de las calderas que surten a los trenes por allí circulantes.

Vista terrenos tren de Villarroya de la Sierra

Seguidamente de El Molino, en la parte de la carretera, empieza la obra de D, PEDRO AGUARON. El lugar llamado RINCON DE COSTA. Una amplísima superficie de pinar y tablas de tierra, destinadas a arbolado. Anchos paseos por medio de los pinos, con bancos de cemento, todos ellos escritos con temas alusivos a los árboles, pájaros, etc. En fin todo cuanto se relaciona con el campo.
También se encuentran taburetes y mesas de pino, construidos con pinos allí criados a los 6 o 7 años de su plantación.

Vista de cabaña típica

El nombre de este pinar, no hay que decir a quien está dedicado “RINCÓN DE COSTA“. D. Pedro Aguarón, amigo y gran admirador del insigne aragonés D. JOAQUIN COSTA.


Donde el visitante queda más sorprendido en su visita a este lugar, es en el promontorio formado por una pequeña caseta, con piedras traídas de diversos lugares, que parecen arrancadas de cuevas donde la naturaleza ha volcado todo su esplendor. En medio de estas piedras hay una oquedad donde se conserva un busto de la cabeza de Joaquín Costa, encima de una piedra tallada, donde figura el año de su nacimiento y muerte. Ésta pequeña cueva está resguardada de la lluvia y fuertes vientos, ya que acostumbra haber revistas y algún que otro libro, todos relacionados a temas agrarios, es lamentable que haya personas incultas que hollan este lugar y se dediquen a veces a romper las revistas y libros, algunos de gran valor, pues recuerdo que por el año 1953- 4, en una de mis visitas pude leer un libro en el que narraba la historia de los alrededores del Moncayo, y también algunos datos relativos al Santuario de la Virgen de la Sierra, con fechas antiquísimas. Ya digo, es un placer, en un atardecer de verano darse una vuelta por este maravilloso Rincón, y respirar este aire puro y lleno de olor de los cimbreante pinos.

Vista Rincón de Costa de Villarroya de la Sierra

Todos los nacidos en Villarroya de la Sierra, tenemos que estar agradecidos a este hombre, emprendedor, entusiasta y amigo de todo cuanto se tratara de árboles. Otro rincón con parecidas características, también creado por el Sr. Aguarón, se halla situado en la misma estación de ferrocarril. Hoy día, no están tan bien cuidados como antaño.

Vista de la viñas de Villarroya

Demos gracias a este hombre, que en todos sus años de existencia ha dedicado la mayoría de sus horas a su obra, obra que ha de perdurar durante muchos años. Roguemos para que cuando este hombre falte, su obra se vea continuada por sus herederos o por el Ayuntamiento. Para que desde la otra vida pueda ver como su obra no queda atrás, si no que se va engrandeciendo al pasar de los años.
Y ya dejando atrás el Rincón de Costa, y siguiendo la ruta de la carretera, a un lado Caravieja a otro Río la Vid, La Mancha y Cara Soria (alta), más arriba LaTrinidad, La Pasada con el Puente La Fresneda y El Estanque.
La Trinidad, nombre dado a este paraje por estar enclavado en la misma ermita de la Santísima Trinidad, de origen antiguo.

A esta ermita se sube el día de tal festividad, para los pequeños que días antes no han subido a la Virgen, es aquí donde sus madres acostumbran a llevarlos. Los pequeños se lo pasan en grande, pues como la distancia es corta, son mayoría los que asisten. Hace algunos años era típico al igual que en la Virgen, jugar a los carteles en las mesas que algunos confiteros del pueblo instalaban, los había con
suerte y se hacían buena provisión de dulces y los que no se veían premiados, tenían que comprarlos al final, pues si subía a la Trinidad a la vuelta había de repartir entre los familiares los consabidos caramelos.
Después se oía la Santa Misa, y una vez terminada, se bajaba al estanque para almorzar, aunque más que almuerzo se trataba de una suculenta comida. Algunos una vez almorzados ya se marchaban al pueblo, pero la mayoría permanecían todo el día por las choperas y alrededor del estanque, no hay que decir que las cuadrillas de jóvenes son las que se divertían de lo lindo.

Las Fuentes

Vista de la Fuente de Villarroya

Una costumbre muy arraigada en los habitantes de Villarroya, eran las meriendas por las choperas y fuentes y en las bodegas. Se escogía la parte de arriba del pueblo. La primera era El Caño, que durante muchos años se iba a buscarla para llevarla a casa. Era muy buena y salía fresca. Esta agua provenía del río de un poco más arriba y servía para regar una parte de vega, desde su salida Malos Años, la Bercebala, Albercas y Caravilla.

Vista de la Fuente de Villarroya


Igualmente había otra fuente de estas características que salía por la Bercebala, un poco más debajo de la estación. Recuerdo cuando se hizo la zanja que la conducía, un poco más abajo del puente del río. Naturalmente provenía de aguas subterráneas.
Con esta agua se regaba Bercebala, Oteruelo y creo que llegaba hasta El Vergal.
Siguiendo con las fuentes, ya se llegaba a la de CARAVIEJA.
Por las choperas se hacían muchas meriendas, y era un sitio que al estar muy cerca del pinar de RINCON DE COSTA, y no muy lejos del pueblo, era de las más concurridas.
Otra muy conocida era la del ESTANQUE. Naturalmente que al estar pegando al mismo era de las más visitadas, y sobretodo el día de la Santísima Trinidad, donde después de escuchar la misa en la ermita, se efectuaba la comida y hasta la merienda.

Vista del Estanque de Villarroya de la Sierra

Más lejana estaba la del ESPOLON, que casi lindaba con EL HORCAJO. Alguna vez habíamos organizado la merienda, bajo la buena sombra que proporcionaban las dos acacias que había, pero al estar tan distanciado no era muy concurrida.

Otra también muy conocida era EL ENCAÑADO DE SILVERIO, en Río La Sierra. Todos los sitios donde salía agua se aprovechaban para montar meriendas.
No muy lejos de allí, en el paraje de LAS FUENTECILLAS, salía una fuente que tenía una buena pila. Yo la conocía mucho por tener mis abuelos al lado una finca con viña y algunos cerezos, y él la cuidaba mucho.
Y a no más de 50 metros, había una gruta, donde salía el agua más fresca y mejor de todas. Esta agua no se desperdiciaba, ya que una balsa recogía el caudal, y que antiguamente servia para regar unas fincas que a un kilómetro de distancia, era conducida por una pequeña acequia, que había entre  dos montañas, y que regaba una finca de EUSEBIO GRACIA.
Y fuentes conocidas, había algunas más, LOS MOLINIEROS, FUENTE LAS PILAS, LA SALUD, estas dos últimas en el camino de CARA TORRIJO. Creo que la de FUENTE LAS PILAS, había abrevadero para las caballerías.

Las Ferias

Y, como no, hay que hacer mención a las Ferias de Septiembre de Villarroya que se celebraban los días 17 ,18 y 19 de Septiembre, y partir de la construcción de la Bodega Cooperativa, se continuaba también con el día 20.
El día 17, a primera hora de la mañana, la plaza se vestía de gala, puestos de gentes con sus paradas de ajos, sandías, cuévanos, cestas y otras cosas.

Participantes de las Ferias de Villarroya de la Sierra

Por la mañana, a las 9, durante los tres días, la banda de música ( la más antigua de España) nos despertaba con su alegre Diana, dirigida por el maestro D. MANUEL  ACON.
No faltaba la parada de churros, que montaban una familia de Calatayud, que año tras año no se olvidaban de las fiestas.
El fotógrafo se instalaba en la pared de CHAVARRIA, con gran telón al fondo con paisaje pintado.
A las doce, la banda de música tomaba asiento en el kiosco y nos amenizaba con el concierto, La Alegría de la Huerta, Una Noche en Calatayud, y como no Los Sitios de Zaragoza, etc. Las personas mayores sentadas en la barbacana y bancos colindantes, escuchaban estos conciertos.
A medio día solía haber el «baile vermut» en la Pista de Jesús Martínez y en el Casino Agrícola, y se llevaban a la juventud y algunos más.
Por las tardes, algunos juegos y carreras y algún año toros. Desde luego, si había toros las ferias ganaban mucho en animación de gente, ya que de los pueblos de alrededor y muchos amigos se desplazaban a ver la novillada y alguna vaquilla para los más atrevidos. Algún año había venido la banda musical EL EMPASTRE.

Participantes de las Ferias de Villarroya de la Sierra

De los novilleros también alguno había destacado. El más famoso fue JAIME NOAIN, que llegó a ser matador. Este torero merece especial atención, ya que se casó con una del pueblo. Sus hijos pasaron muchos veranos en el pueblo. Residían en Madrid.
Otros toreros conocidos fueron MELCHOR SORIA, y otro apodado EL BALA.
Una persona muy conocida en el ambiente de los toros era el tío PIQUETES, que se cuidaba de abrir los toriles.
Como digo, los toros animaban las ferias, ya que 8 ó 10 días antes, ya se preparaba la plaza, montando las puertas, entablados y barreras.
También era espectáculo los encierros, ya que antiguamente los traían con los mansos, por los caminos, y claro, pues se oían rumores, de que si estaban en El Vergal, y cuadrillas de jóvenes se desplazaban a ver si los localizaban.
A veces Los traían por la mañana y la plaza se llenaba para ver como eran introducidos en los corrales.
Un año, un toro se escapó, rompiendo la puerta y creo que fue a José Mª Serrano (Rufo) que lo arrastro. No se si hubo alguna desgracia.
Una cosa muy típica era enjaezar las mulillas, para el arrastre de los toros. Collerones con cascabeles, mantas de adornos, y un arreglo muy especial, era el que hacían los esquiladores, ya que sobre las ancas de las mulas, hacían unos dibujos y letras de maravilla.

Participantes de las Ferias de Villarroya de la Sierra

La carne de los toros, era vendida al día siguiente en el pueblo.
Después de los toros, el baile de la Pista era un hervidero, acostumbrados todo el año a bailar con el tocadiscos, esos días había orquesta. Baile al mediodía, por la tarde y por la noche.
En el Casino Agrícola, también había baile, pero únicamente podían ir los socios. Las chicas si podían entrar todas.

Participantes de las Ferias de Villarroya de la Sierra

Hasta los años 1950 y más, fueron personas como sl dijéramos » la alta sociedad del pueblo» o sea » los labradores y comerciantes». Años más tarde se fue abriendo la veda, y con la presentación de un socio viejo, ya te podías hacer socio.
A veces algunas parejas que no  podían entrar, bailaban en la carretera.
Algún año había fuegos artificiales y el último día una pequeña traca.
También era costumbre, que a las 4 ó 5 de la mañana, se formara alguna ronda, que recorrían las calles del pueblo y así se llegaba al final de las ferias.

Participantes de las Ferias de Villarroya

A los pocos días de las ferias, llegaba un fin de semana con nueva fiesta «El Cristo del Consuelo», tal vez más popular que las ferias. Esta fiesta era pagada por los Cofrades.
La fiesta empezaba el sábado por la tarde, con un pasacalles. Por la noche se celebraba una misa a la que asistían los Cofrades con su vara. A la salida, se dirigían al salón donde se servia un refrigerio. Yo la había llevado algunos años en representación de mi abuelo Vicente.

Participantes de las Ferias

Cada año había un Cofrade Mayor, que era el que celebraba la fiesta especialmente. Los actos que se celebraban, eran como un día de feria. Algún año también había toros.
Al día siguiente se subía a la Virgen.

Las bodegas

Las bodegas en Villarroya, eran una gran riqueza. Naturalmente, que quienes las poseían eran la gente que se dedicaba al campo, o sea, los labradores. Digo que eran los labradores, por que todos sabemos que antaño había una diferenciación en cuanto a que la parte baja del pueblo, parte de Real Alta , Real Baja y Carretera, con alguna excepción, eran los que se dedicaban ala tierra y comercio. Los barrios altos, como Santa María, Santa Catalina y Somontano, eran de gran mayoría pastores.
A medida que fueron pasando los años, el panorama fue cambiando y muchas que durante generaciones se dedicaron al pastoreo, cambiaron por la tierra, estando ahora muy repartida entre la mayoría del pueblo.
Por esta diferenciación, es por lo que no todos poseían las preciadas bodegas.
Las bodegas eran necesarias, y como el pueblo esta en gran parte en llano, las bodegas están bajo nivel del río, lo que ocasiona que muchas de ellas se inunden, y se filtraban de unas a otras
Pero bueno, lo que yo hago hincapié, en que eran un bien muy preciado, ya que el vino había que guardarlo en algún sitio y hay está el motivo de su valoración.
Puede decirse que casi todo el pueblo, de la parte baja y también en parte alta, había bodegas y muchas de ellas acompañadas de los tinos o lagares.
Una vez que la uva había sido pisada y hecha la fermentación, se procedía al llenado de las cubas que se había instalado en las bodegas.
Los tinos los había que ya conectaban con las bodegas, por lo que ya era fácil llevarlo hasta la cuba y se evitaba tener que llevarlo a otro lugar, lo que ocasionaba que el vino fuera llevado en «botos» hasta el lugar donde se asentara la cuba o algún depósito de cemento que se fueron construyendo.

Las calles eran procesiones de personas con el boto al hombro,  y no despacio, si no al trote y a una distancia se intercambiaba con otro, haciendo una cadena. En estas tareas, casi siempre se tenían que ayudar las familias, dado que se necesitaban varias personas. Luego venía el prensado, y también había que transportar el orujo a donde estaban las prensas y normalmente al haber pocas se hallaban distanciadas de las bodegas. Y nuevamente el vino que se sacaba del prensado, debía ser llevado a la bodega.
En las bodegas, bastaba con tener un poco de ganas, se compraban algunos arenques y alguna otra cosa, y ya estaba la merienda preparada.
¿ Cuántas juergas se habían hecho en estos sitios?.
Yo recuerdo una, en que llevaron a un comediante algo «sarasa» y salió contentito, y no le debió de ir mal, dado que volvió en otras ocasiones,
¿ Y la noche, que con un pato guisado en el río , también se organizo una buena?.
Eran constantes las juergas que se montaban, y más en invierno, ya que se solía estar muy bien, igual que para el verano se estaba fresco.
Pero casi todos ciclos tienen su final, y a las bodegas les llegó el año 1956, cuando se inauguró la Cooperativa del Campo Virgen de la Sierra. A partir de ese año, tinos y bodegas se tomaron un descanso del duro trabajo que durante siglos habían desempeñado. A partir de entonces, muchas de ellas se quedaron vacías, ya que desde Andalucía vinieron a llevarse la madera de las cubas para montarlas en su tierra.
Muchas de ellas puede que todavía sobrevivan.
Algunas bodegas, fueron campos de cultivo del Champiñón, aunque creo que no debía ser muy rentable, ya que no duró mucho.
Una cosa que se me olvidaba, era que el vino no se quedaba eternamente en las cubas, si no que había unas personas, que por aquel entonces se dedicaban a sacar el vino nuevamente en «botos» y llenaban pipas o foudres cargados en camiones. Estas personas eran unas personas que mediante una subasta habían ganado el concurso, y todo el vino era controlado por ellos, dado que por entonces estaba sujeto a un impuesto.
¿ No creéis, que hoy en día, la juventud sabe que el pueblo está lleno de bodegas y lagares, y que debajo de sus casas, hay grandes cantidades de agua.?
Los de Torrijo, las tienen en una ladera de un cerro. ¿Serán más seguras?.
Bueno, ahora con la Cooperativa todas sobran.
Mis recuerdos por las buenas meriendas abundan, y me olvido de cuando me tenía que meter dentro de una cuba a fregarla. Cosas del pasado.

El Tren

Desde luego, los vecinos de Villarroya, éramos unos privilegiados. Teníamos coche de línea y ferrocarril. Algunos utilizaban el coche de línea, pero sin lugar a dudas el tren era el más utilizado y cómodo.
Había que ver la estación en algunas épocas. Recuerdo cuando se recolectaba la remolacha, grandes montañas de la misma se amontonaban en espera de que el tren remolachero viniera a cargar.

Estación del Tren de Villarroya de la Sierra

En la estación siempre había movimiento, ya que seis u ocho trenes pasaban cada día. Los mercancías hacían largas paradas para cargar y descargar. Las mercancías que llegaban, normalmente eran para los comerciantes, eran acarreadas hasta el pueblo en carro.
Antonio López ( El Panadero), era el encargado de su reparto.
En verano, algunos chicos, aprovechaban para sacarse algunas monedas. Acudían con sus botijos a dar de beber a los sedientos viajantes.
En temporada de incorporación a la mili, había trenes que con varios vagones de carga, portaban a los jóvenes que se incorporaban al ejército y venían como si fueran ganado. Normalmente procedían de Galicia y León, y los llevaban a los cuarteles de Calatayud , Zaragoza y Valencia.
Otra estampa curiosa, era el desfile de mujeres, procedentes de Soria y sus pueblos, que debido a su parentesco con los trabajadores de RENFE, tenían el viaje gratis.
En aquellos años de escasez, los trabajadores de las grandes empresas, tenían sus economatos y les daban artículos casi imposibles de comprar en tiendas, como el azúcar, tabaco,  aceite, etc.
Pues bien, yo recuerdo, que por un kilo de azúcar, se llevaban 30 kilos de buenas uvas .Con el tabaco también hacían buen negocio.
Cuando se construyó la cooperativa, el tren también ayudó, ya que grandes cisternas eran llenadas desde la misma bodega con una manguera. Naturalmente que la mayoría lo hacían en camiones cisternas.

Estación del Tren de Villarroya de la Sierra

La construcción del ferrocarril al igual que la carretera, levantó muchas protestas, dado que el lugar por donde discurría, cortaba por medio las fincas en mayoría vega, y sus propietarios no estaban de acuerdo, aunque ante unas obras de esas características, nada se podía hacer.
A lo largo de su recorrido, quedaban tierras propiedad de RENFE y eran utilizadas por sus trabajadores, para sacarse comida para casa, toda clase de verduras, etc.
Naturalmente , que no todo fue de color de rosa. Recuerdo que el año 1947 o 48, hubo una gran tormenta, y al pasar el tren por el puente de Valde los Calvos, descarriló y hubo algunos muertos y heridos.
Por los años cincuenta, se acostumbraba mucho a pasear por las noches de verano, hasta la estación, y así mismo ,a coger agua de la fuente que venía de Rio la Vid.
El Pinar de D. Pedro Aguarón también era muy visitado, teniendo que pasar a través de las vías del tren . Desde lo alto del pinar, se podía contemplar una bella panorámica de todo el pueblo.
El Jefe de Estación, tenía una bonita casa, que formaba parte del edificio, donde estaban las palancas para el cambio de vías, sala de espera y otra sala para guardar mercancías que se despachaban rápidamente, y para las que se expedían para fuera.
Y esta es mi visión, de este paraje, tal vez, el más transitado del pueblo.

Las Eras

He aquí otra de las cosas importantes que teníamos en Villarroya de la Sierra, pero que poco a poco, les está pasando como a las bodegas:   «LAS ERAS“.
En verdad, las eras ya no son lo que eran. En este año 1967 , todavía quedaban algunas en activo en Villarroya, pero más del 50% están abandonadas, ya no hay trigo, ni cebada que trillar como antaño.
Las «eras», eran un complemento mas en todo lo relacionado con los cereales, y por tanto desempeñaban su papel en este entramado.
Primero se empezaba con la siembra, allá por mes de octubre o Noviembre. Aguantaba el sembrado los fríos del invierno, y a medida que pasaban los meses. Iban creciendo poco a poco, y si el tiempo acompañaba, lluvia y sol, allá por el mes de Junio, cambiaban su color ,verde por el amarillo y entonces venían las cuadrillas de segadores. Que en fajos o gavillas, quedaban esparcidos por el rastrojo, hasta que eran amontonados.


Vista de Pajares y Eras

Normalmente era la cebada la que primero se segaba. Luego venían las avenas, centenos y por ultimo el trigo.
En estas fechas, por todos los campos se veían las pilas de fajos, en espera de ser acarreados a la era.
Comparamos las bodegas y las eras, y eran unos complementos indispensables, ya que la uva y la bodega se necesitaban al igual que la era y los cereales.
Una vez que se acababan las casas del pueblo, venían los corrales y a continuación eran las eras y pajares las que se adueñaban del terreno. No
todas tenían su pajar, por lo que ocurría al igual que con el vino, la paja debía ser trasladada a otro lugar.
Desde mediados de Julio, ya se comenzaba con el acarreo de las mieses, que se apilaban en las eras, a la espera de que hubiese suficiente para hacer la «parva» y trillarla.
Puede decirse, que por aquellas fechas y hasta aproximadamente la Virgen de Agosto, las «eras» se convertían en la convivencia de casi todo el pueblo.
A primeras horas de la mañana, (seis o siete) se iba a echar la parva, que consistía en desatar los fajos de mies y esparcirlo por toda la era. A continuación se «torneaba» con las horcas para deshacer la mies.

Se almorzaba en casa, y allá a las nueve se cogían las caballerías, y se les ponían unos collerones y se ligaban al trillo. Y así durante cuatro o cinco horas rodando por encima de la mies, se iba desgranando el grano de las espigas, hasta quedar convertida en paja. Entonces llegaba la hora de recoger la parva, para lo cual se contaba con la ayuda de varios miembros de la familia, para barrer toda la era. No pocas veces había que forzar el recogimiento, porque el cielo amenazaba tormenta.
El trillar, no era muy pesado, ya que los más jóvenes y a veces las mujeres, eran las que conducían el trillo, en medio de sus buenos cantos de jotas.


Vista de Pajares y Eras

Y una vez amontonada la parva, llegaba el «aventar»,había que esperar la tarde, que era cuando el aire solano solía soplar. Así que todo requería un acompañamiento de tiempo, ya que si algún día llovía, estropeaba la mies y durante unos días no se podía echar otra parva, hasta que no se secase.
Una vez que se cribaba, se procedía a llenar las talegas, y se llevaban a los graneros o cebaderas de casa.
Todos estos trabajos, hay que reconocer, que tenían su faena, no obstante, ya hay  un dicho muy famoso que dice «comerás el pan con el sudor de tu frente». Así que se podrían contar los sudores que hay que padecer, hasta que el pan entra en casa.
Sembrar, escardar, Segar, Acarrear, Trillar, llevar al granero. Bajar con el carro a moler a Calatayud y por último amasar y llevar al horno.
¿Cuántos sudores? , pero teníamos pan.
Ya hace algunos años que muy poca gente amasa. Se entrega la harina al panadero y ya puedes ir a buscar el pan cada día.
Las eras, siguen haciendo su trabajo, pero yo presiento, que a no tardar muchos años, quedarán obsoletas, y poco provecho se sacará de ellas. Ya funcionan las cosechadoras, aunque aquí por ser terrenos un poco difíciles y de poca extensión, de momento no pueden hacer el trabajo, pero poco costará llevar la mies al lugar donde esté la máquina, y por consiguiente no se necesiten las eras.
Pero …. ¡que bonito era ver acarrear, cuatro o cinco caballerías, con sus fajos de mies, por las lomas de Las Casas, procedentes de los Molineros! Qué .. paseos.
¡Qué bonito era escabar las viñas, cavar remolacha, vendimiar o segar!Todo era bonito, pero que caro resultaba al cuerpo.

Las acequias

En Villarroya de la Sierra las acequias eran como una muralla, que rodeaban toda la vega.
El nombre «acequia», viene de una palabra árabe, ya que fueron los árabes los que diseñaron este sistema de riego.

¿Cuánto, debemos a las acequias?, ¿Quién, no ha estado ligado a ellas?
Yo recuerdo, que por el mes de Febrero o Marzo, se procedía a su limpieza y adecuación. La mayoría de gente de Villarroya, que tenía alguna finca por donde transcurrían las acequias, se unían en cuadrillas y se dividían los tramos a limpiar y arreglar alguna hendidura, por donde se perdía el agua.
Puede decirse, que la vega dependía de las acequias, ya que sin ellas, hubiese sido imposible poder criar lo que en ellas se cultivaba, que prácticamente era casi toda la comida que se consumía en las casas, desde lechuga, tomates, patatas,
remolacha, alfalfa, pimientos, etc. etc.
Muy pocas cosas de las que se cultivaban se podían obtener fuera salvo cuatro cosas  que algún vendedor ambulante pasaba de vez en cuando, a vender a los que no tenían una tabla de tierra regable para poder cultivar.
¿ Así… que hubiera sido de nosotros, si no hubiéramos tenido.. las acequias?
¿ De donde procedían? Pues, naturalmente, de los ríos.
Una acequia muy singular, era la que procedente de casi a orillas del monte, o sea en El Peirón O Cara la Sierra alta, recorría un terreno áspero, que no todo se podía regar. Discurría por el Llano de la Virgen, y al borde del Calvario atravesaba Los Llanos, regando la parte hacia la carretera y acababa al lado del Cementerio. Naturalmente que esta acequia, era principalmente de la temporada de Primavera, y se utilizaba para regar campos de cereales en su mayoría. En verano el río se quedaba seco.
Curiosos y difíciles eran los recorridos que efectuaban las acequias de ambos lados del río.
La del monte, recogía sus aguas, arriba por el Horcajo y regaba las Ventas, Vega, Vadillo y acababa en el barranco de La Fresneda.
En el Estanque, que era siempre donde más agua se recogía, se repartía, mitad de la semana, para el lado de la carretera, y los otros días para la otra parte

En este último lado, también había unas aguas subterráneas, que desde Valde los calvos, hasta Cara Moros -y parte del Oteruelo se regaban.
El caudal era pequeño, por lo que muchos regantes pasaban del turno, y esperaban el día que les correspondía, cuando entraba la proveniente del río.
Por el lado contrario, la acequia, recorría desde el Estanque, Puente La Chorrumba, todo Cara Soria, Molino, Pingones e incluso pasaba por el pueblo, Somontano y atravesaba la carretera, por donde está la casa del médico.
Creo que las otras dos acequias que se surtían de las aguas subterráneas, ya las he detallado en otro apartado. o sea, las que regaban la parte de la Bercebala y Albercas y provenía de El caño.
La otra, era la que regaba la parte contraria.
Cuando las acequias, se vestían de gala, era cuando a veces, en veranos secos se daba suelta al Estanque, y entonces sí que rebosaban.
Naturalmente que de esto sólo se beneficiaban las fincas situadas desde el Azú de El Estanque.
El reparto, era un ritual que se hacia a primera hora de la mañana y a veces por la tarde. Se decía «echar suertes».
Una persona muy experta, era Caparrotas, que lo decía así:  «Tú desde las 10 hasta las diez y media y se lo dejas un poco más». Otro que también lo hacía en esta parte de Caravieja, era Tomás Yagüe.
Había que calcular las anegadas que había en el recorrido que ese día se regaba, y repartirla. Había sitios que se echaban «suertes» por la mañana y por la tarde, ya que se hacía un recorrido inverso.
Muchas horas de baile me había perdido por el riego, ya que sábados y domingos eran días de riego.
¿Seguirán… las acequias…..el camino de las eras, y bodegas …?
Tiempo al tiempo, y la verdad es, que mucho sentiría que esta gran obra se perdiera.